• Del nuevo grupo de titulados en diferentes ramas de las diversas universidades del país, muy pocos logran conseguir una fuente de trabajo estable y con razonable remuneración.
Aproximadamente 4.500 personas de diferentes universidades, se gradúan anualmente como nuevos profesionales en el país, quienes posteriormente enfrentan problemas para su inserción laboral.
La última encuesta trimestral de empleo del Instituto Nacional de Estadística (INE) refleja que existe mayor desempleo en la población de 20 a 29 años de edad.
Uno de los grandes problemas que atraviesa Bolivia es la falta de empleo o fuentes laborales, lo que inclusive obliga a muchas personas a abandonar el país con el propósito de buscar oportunidades de trabajo en el extranjero y los nuevos profesionales no son la excepción, pues enfrentan obstáculos pese a la preparación académica que reciben durante cinco años en las casas de estudios superiores .
Después de culminar la etapa universitaria, los nuevos titulados en diferentes ramas, formados en las diversas universidades del país, enfrentan la realidad de la inserción laboral, puesto que de este grupo son muy pocos los que logran conseguir una fuente de trabajo estable y con una razonable remuneración.
Según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística (INE), desde el año 2000 en Bolivia existen cada vez más profesionales. El último dato del año 2007 reflejó que se graduaron 4.570 nuevos profesionales en todo el país, donde en La Paz egresaron 1.924 profesionales, en Santa Cruz 1.526 y en Cochabamba 894.
Desde marzo del 2009, el INE realiza estudios trimestrales de la situación de empleos, en el primer trimestre del año 2010 el 42 por ciento de las personas desempleadas oscilan entre los 20 y 29 años de edad, teniendo en cuenta que los universitarios concluyen sus estudios entre los 24 a 25 años promedio.
EGRESADOS
A esta cifra se suman los 4.277 egresados anualmente que aún no cuentan con un título profesional por diferentes circunstancias, una de ellas el factor económico puesto que realizar la tesis de grado, como ejemplo, cuesta entre 1.500 a 2.000 dólares, teniendo en cuenta que en el caso de una gran parte de estudiantes de las universidades estatales, tienen una situación económica mediana o baja.
En ese sentido, EL DIARIO dialogó con algunos estudiantes de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) de La Paz, quienes manifestaron que su mayor deseo es culminar la carrera; sin embargo temen a las dificultades que se les vaya a presentar al momento de la inserción laboral.
Diego Rodríguez, estudiante de quinto año de la carrera de Administración de Empresas mencionó que ya trató de buscar trabajo relacionado a sus estudios, sin embargo, dijo que tropieza a menudo con el tema de la experiencia. “Fueron muchas las veces que acudí a tocar puertas de empresas, una gran mayoría se rehusa a recibir personas que comienzan en esta profesión y exigen experiencia mínima de dos a tres años; yo no entiendo cómo es posible tener experiencia si nadie te da la oportunidad”, expresó.
Este es uno de los casos con más similitud en la comunidad universitaria, según indicaron los estudiantes que dialogaron con EL DIARIO, añadiendo que las empresas de los diferentes rubros, en su mayoría no ofrecen oportunidades de trabajo a los nuevos profesionales o “principiantes”, prefiriendo a las personas con vasta experiencia.
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