Estudiantes rompen el diálogo y la situación se agrava en la UAJMS

Durante toda la mañana y parte de la tarde del miércoles, las calles Bolívar e Ingavi permanecieron bloqueadas por los estudiantes.

El diálogo convocado ayer por el Consejo Universitario conformado por docentes, estudiantes y las máximas autoridades como el Rector y Vicerrector de la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho (UAJMS), fracasó por la ruptura de diálogo entre sus representantes, haciendo que la situación se agrave y se amplíe la medida a las provincias desde hoy.

Ayer miércoles, la situación era tensa en los predios de la carrera de Odontología, donde se desarrollaba esta reunión, la que duró varias horas y al final fue en vano porque los docentes abandonaron la reunión, sin aceptar que la docente aludida Wilma Llanos sea retirada de la Universidad, que era lo que exigían los estudiantes.

Desde hoy se prevé el cierre de las facultades en las provincias, en Yacuiba, Villamontes, Caraparí y El Palmar, además que el campus universitario de la capital y la Carrera de Enfermería continuarán cerrados, mientras se logre una solución, no descartándose además que un grupo de estudiantes ingresen en huelga de hambre como lo anunció Marcelo Cano, ejecutivo de la Confederación Universitaria Boliviana.

Por su parte, Ernesto Vera, dirigente de la Carrera de Enfermería mostró su molestia al no haberse logrado acuerdos satisfactorios al pedido de los estudiantes. Dijo que lamentan que el Rector, unilateralmente quiera tomar las decisiones, sin respetar a los estudiantes que exigen la renuncia de la docente.

“EL Rector ha manifestado que él tomará las decisiones y nosotros hemos sido claros, porque no queremos que esa docente siga dictando cátedra. La postura de los docentes es que quieren solo que se suspenda de forma temporal, pero ella seguirá ganando su salario y seremos perjudicados nosotros y eso no podemos permitir y por ello hemos decidido radicalizar las medida de presión”, anunció Vera.

DOCENTES NO DIALOGARÁN BAJO PRESIÓN

De acuerdo a las versiones del dirigente de los docentes, Juan Carlos Kery, la ruptura del diálogo se debe a que los estudiantes retrocedieron en su posición, derivando ello en que los miembros dirigenciales se retiren del lugar bajo fuertes presiones, anunciando que si no se suspende la medida de presión el diálogo está cerrado.

“Se decidió no retornar a ninguna negociación mientras no sean suspendidas las medidas de presión por parte de los estudiantes, donde además exigimos garantías para los docentes puesto que fuimos rehenes por más de una hora y media”, anunció.

Kery, además anunció que iniciarán un proceso contra los estudiantes que evitaron su salida, debido a que recibieron incluso agresiones físicas y fueron amedrentados con petardos a quemarropa.

“Vamos a iniciar un proceso por las agresiones físicas que se recibió por parte de los estudiantes que estaban ahí, también por la toma de los predios y la difamación de los dirigentes en días anteriores”, explicó.

(RECUADRO)

LA SOLUCIÓN EN MANOS DEL RECTOR

Los docentes luego del susto que se llevaron en predios de la carrera de Odontología, decidieron dar la potestad al Rector para que tome las acciones convenientes, para normalizar las actividades académicas, siendo que de acuerdo a estatutos, cuando no se resuelve nada en Consejo Universitario, la máxima autoridad es la que decide.

“Como docentes apoyamos toda medida que ayude a agilizar este tema, pero no así por acciones de unos cuantos dirigentes, que esto lo están tomando como chacota, no sé con que fines, pero debo decir que no se va a permitir ninguna dictadura estudiantil”.

Finalmente anunció que las clases se restablecerán sin indicar hora ni fecha, todo dependerá de las acciones que vaya a desarrollar el mismo Rector. “Estamos viendo que se pueda normalizar este tema, no sabemos cuando pero estamos trabajando en ello”, afirmó el dirigente de los docentes.

Pese a los reiterados intentos no pudimos comunicarnos con la máxima autoridad universitaria, Marcelo Hoyos, quien ordenó que no se dejara ingresar a los medios de comunicación al Consejo Universitario por lo que estableció un reguardo muy cerrado en la puerta de ingreso.