Son 33 universidades privadas del país que desde ayer cuentan con un decreto supremo que garantiza su funcionamiento legal.
En un acto especial celebrado ayer en el campus de Tiquipaya de la Universidad del Valle (Univalle), en Cochabamba, se les reconoció su plena vigencia, así como su contribución al sistema universitario, a la ciencia y al conocimiento que están establecidos en la Constitución Política del Estado y la Ley Educativa Avelino Siñani. Dos de estos decretos supremos se entregaron a universidades de reciente creación como son Dopsa Bolivia (Santa Cruz) y la universidad para el desarrollo e innovación UDI (La Paz). Asimismo, las autoridades entregaron cuatro notas de validez a la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra (UPSA), a la Universidad Privada del Valle (Univalle), a la Universidad Cristiana de Bolivia y a la Universidad Privada NUR, mismas que ya contaban con decretos supremos de anteriores gestiones. Otras 27 universidades que sólo contaban con resoluciones ministeriales recibieron este documento que jerarquiza las disposiciones normativas para avalar su apertura.
Según el ministro de Educación, Roberto Aguilar, aún queda pendiente la acreditación de unas cinco universidades que se encuentran en proceso de regularización de sus documentos. Explicó que si no cumplen con los requisitos serán cerradas.
En la oportunidad, el presidente Evo Morales destacó la buena imagen que tienen las universidades privadas frente a las públicas, de quienes desconoce sus aportes al conocimiento y la tecnología. Sólo se conoce la lucha por la autonomía, finalizó.
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