Pagina Siete
Juan Carlos Calvimontes, ministro de Salud, consideró ayer que los bolivianos que estudian medicina en Cuba tienen “más sensibilidad humana” que los galenos instruidos en otros países.
La autoridad respondió así ante la consulta de este medio sobre si los bolivianos que se forman en el país caribeño estarían capacitados para trabajar en el país y eventualmente reemplazar a los galenos que se nieguen a acatar el decreto que restituye la jornada laboral de ocho horas para los médicos.
“De la misma forma que cualquier profesional que se capacita en el exterior. Tienen la misma formación, incluso con más alta sensibilidad humana”, dijo.
El martes, la dirigencia de la Confederación Nacional de Juntas Vecinales (Conaljuve), que firmó un convenio con el ministerio para realizar un control social al trabajo médico, propuso sustituir a los salubristas que no quieran cumplir las ocho horas por los jóvenes que fueron a estudiar a Cuba y que retornarán pronto. Se dijo que 5.000 profesionales volverán, después de cinco años de instrucción.
Consultado sobre la viabilidad de esta sugerencia, Calvimontes señaló que “todavía no se analizó esa posibilidad”.
El ministro de Salud ofreció ayer una conferencia de prensa en Palacio de Gobierno, en la que convocó a los entes colegiados y gremiales de salud a trabajar en mesas técnicas para la reglamentación del citado decreto.
La norma fue anunciada el 24 de enero tras una reunión de gabinete, pero hasta ayer no fue publicada en la Gaceta Oficial de Bolivia. Según la autoridad, el documento no salió al público porque “le faltaban algunas firmas, pero ese trabajo ya se terminó y ya se lo conocerá”.
La reglamentación de la norma deberá ser presentada en 60 días junto a los mecanismos de su aplicabilidad, advirtió la autoridad, quien invitó la tarde de ayer a un gremio del sector salud para abordar esta tarea. S in embargo, según la dirección de Comunicación del ministerio, no se concretó ninguna reunión.
Los convocados no eran del Colegio Médico de Bolivia, cuyo presidente, Alfonso Barrios, descartó que la organización trabaje en la reglamentación del decreto. Por el contrario, ratificó el paro de brazos caídos dispuesto para hoy en todo el sistema de salud del país, en rechazo a la ampliación de su jornada laboral.
El ministro de Trabajo, Daniel Santalla, advirtió que para realizar la huelga se deben seguir pasos formales que le den un carácter de legalidad; de no ser así, existen mecanismos de sanción.
“Todavía no se siguieron los pasos legales respectivos para iniciar esta medida y lo que corresponde a esta cartera es aplicar normativas vigentes. Todo paro declarado ilegal tiene sus sanciones”, apuntó Santalla.
Una “conquista laboral”
Como respuesta a la norma que instruye a los médicos trabajar ocho horas diarias, un informe jurídico del Colegio Médico de Bolivia indica que la carga horaria para sector fue determinado por el Decreto Supremo 09753 del 20 de agosto de 1970.
El sector remarca que la norma es una conquista laboral consolidada que establece una “jornada laboral completa de seis horas, media jornada de tres horas y dedicación exclusiva”.
El informe hace referencia a la Ley 2027 del Estatuto del Funcionario Público, cuyo reglamento fue modificado por la Ley 2104 del mismo nombre. Esta última señala en su artículo tercero, parágrafo III, que los servicios de salud se regirán a base de su normativa interna aplicable, en este caso, los estatutos y reglamentos del Colegio Médico.
Norma y paro
Horario Según el ministro de Salud, el sector de salud siempre trabajó dentro de las jornadas laborales de ocho horas. Sólo que dos de éstas debían ser destinadas a visitas médicas y hospitalarias; este tiempo fue “distorsionado”, dijo. Lo que se busca, apuntó, es que ese tiempo pase al ámbito clínico.
Paro La Comisión Nacional de Salud instruyó a sus bases, a través de un comunicado, acatar hoy el paro de brazos caídos de los médicos, pero redoblando los servicios de emergencias. Esta comisión está integrada por los colegios de médicos, enfermeras, odontólogos, bioquímicos y farmacéuticos, nutricionistas y dietistas, fisioterapeutas y kinesiólogos, además de las federaciones del área de salud, cajas y sindicatos mixtos del ramo.
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