Del total de postulantes que se presentaron este año para ingresar a la Universidad Gabriel René Moreno, apena el 19.58% logró aprobar las pruebas para habilitarse como estudiantes regulares. Según la historiadora y catedrática, Paula Peña, esta realidad no es atribuible solo a Santa Cruz. "El promedio nacional no supera el 10%"afirmó.
Situación alarmante. La Gabriel ayer dio a conocer los últimos resultados del Programa de Admisión Básica (PAB), prueba que se realizó el pasado domingo. El saldo del mismo es lamentable según Álvaro Puente, experto en educación dado que de 6.583 postulantes, cuya preparación era de 12 semanas, solo aprobaron 2.105 alumnos.
En este caso, el promedio de aprobados llegó al 23%. Pero según Helecto Villaroel, responsable del PAB, hay un leve repunte con relación al Programa de Suficiencia Académica (PSA) que a principios de año tuvo un saldo de aprobados solo del 16,66%.
En conclusión, tomando ambos resultados, este año de algo más de 20 mil postulantes a la "Gabriel René Moreno", solo lograron aprobar tanto el PSA y como el PAB, 4.354 estudiantes, lo que equivale al 19,58 % de aceptados.
Un 80,42% se quedó fuera, más aún cuando la universidad cerró cualquier posibilidad de nueva apertura de ingreso por esta gestión.
Una cruda realidad. Por un lado, las autoridades de la Universidad ven el problema a una situación crítica del sistema de educación en las escuelas y colegios. Según el docente Eudal Avendaño, la materia prima con que cada año se encuentra la Gabriel, es de muy baja calidad.
"Los estudiantes fueron preparados para pasar de curso y no para aprender y desarrollar ciencia y tecnología. Creemos que debemos trabajar en coordinación con los profesores de colegio", señaló.
En cambio, para el experto en educación, Álvaro Puente, todo se debe al mediocre sistema educativo que posee nuestro país. "No es falta de coordinación, es falta de calidad. La universidad no puede adaptarse a la mediocridad de nuestra educación boliviana", argumentó.
Apuntó además que nuestros niños no son discos duros. Hay que desarrollar en ellos la inteligencia, la capacidad, la seguridad, el carácter y la personalidad. Eso es lo que no se está haciendo.
Acciones propositivas. Para Paula Peña la problemática recae directamente en la formación escolar donde no es suficiente las 20 horas de estudio semanales para un niño que tiene un potencial mucho más avanzado. "No es posible que en todo el año el aprovechamiento y la enseñanza sean apenas 800 horas, cuando en otros países se llega a 1.500 horas en colegios secundarios", enfatizó. Además destacó que el 85% de los estudiantes no tienen otros cursos extras, por distintos factores socioeconómicas.
Universidades deficientes. Bolivia no figura en los rankings de universidades en Latinoamérica, dice Puente. "Es que el sistema que tenemos es malo. La autonomía solo nos da permiso para hacer lo que nos da la gana". Además la crítica califica de fracaso a las normas educativas actuales.
Estudiantes
Cuatro carreras son las más requeridas
Populares. Las carreras que obtuvieron mayor cantidad de estudiantes aceptados fueron Derecho (219), Ingeniería Comercial (176), Medicina (150), Arquitectura (118) y Contaduría (108). El resto tiene menos de 100 alumnos nuevos.
Escasos. Las carreras que tienen menos alumnos aprobados en este examen son Biología (3) y Electrónica (3).
Sin convocatoria. Construcciones civiles, Comunicación (a distancia), Agrimensura y Mecánica General no tuvieron postulantes aceptados.
Cupos. Según el Departamento de Admisión Estudiantil, quedaron 7.111 vacantes.
Punto de vista
Helecto Villarroel
Coordinador del PSA y el PAB
"Tenemos que trabajar serio en los colegios'
"Definitivamente,tomando en cuenta los dos programas (PAB y PSA) desarrollados durante esta gestión, los aprobados no pasaron del 20%. Eso es preocupante. Tenemos una deserción del 8% que no sabemos si es por factor económico, falta de preparación o a qué se debe.
Lo más grave es que no solo es el bachiller, hay un entorno social que no logra ingresar a la universidad. Yo insisto en que tenemos que trabajar en serio con los colegios. Son muchos factores. Hay que uniformizar el avance de materias bajo un contenido mínimo. El modelo académico diseñado hace 20 años atrás es obsoleto y este es el resultado. Hay que encarar el problema".
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