La Contraloría de Cochabamba realizará una auditoría a la casa de estudios superiores. El daño económico puede llegar a unos 10 millones de bolivianos.
La Contraloría General del Estado (CGE) en Cochabamba llevará a cabo a fin de año otra auditoría a los estados financieros de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), tras recibir información de que varias de sus autoridades y docentes recibieron remuneraciones superiores a los 15 mil bolivianos entre 2009 y 2010.
“Pese al conocimiento de las limitaciones contenidas en las leyes financiales, se persistió desde las universidades en el pago a docentes y autoridades de salarios mayores a los 15 mil bolivianos”, informó el gerente de la CGE, Mario Barriga.
La Contraloría verificará si los funcionarios públicos percibieron recursos económicos de la UMSS y de otras instituciones que reciben fondos provenientes del Estado, puesto que se conoce que algunas autoridades y docentes trabajan también, por ejemplo, en el Órgano Judicial y en la Fiscalía.
En 2006 se emitió el Decreto Supremo (DS) 28609, que establece una política nacional de austeridad y equilibrio económico, y determina que ningún funcionario público puede ganar más que el Jefe de Estado, cuyo salario se fijó en 15 mil bolivianos mensuales.
Barriga dijo que es posible que el daño económico ocasionado supere los 10 millones de bolivianos, si se toma en cuenta que una auditoría detectó que hace cuatro a cinco años se pagó una suma similar que debe ser recuperada.
Recursos
Las universidades del sistema público estatal tienen varios segmentos de ingresos, como el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), la coparticipación tributaria, la subvención ordinaria, además de recaudaciones propias que perciben por la venta de matrículas y otros trámites, explicó el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Arce Catacora.
Según datos oficiales, entre 2005 y 2012 las transferencias del Tesoro General del Estado a las universidades fiscales crecieron en 136,2%, al pasar de 1.203 millones de bolivianos a 2.842 millones.
En ese marco, el vicepresidente del Estado, Álvaro García Linera, destacó ayer el nivel de incremento por transferencias que ha tenido el sistema universitario y agregó que el Gobierno seguirá dando su respaldo a las 11 casas de estudios superiores.
Según el Ministerio de Economía, el citado incremento por transferencias se produjo gracias a la nacionalización de los hidrocarburos que se efectuó en 2006 y con base en la política fiscal estatal que consiguió elevar los ingresos tributarios de 15.874 millones de bolivianos en 2005 a 41.388 millones en 2011.
De los 2.698 millones de bolivianos transferidos a las universidades en 2011, 602 millones provienen del IDH, 1.271 millones de la coparticipación y 825 millones de subsidios y subvenciones.
Ahora, el sistema universitario pide que el TGE le otorgue un incremento del 15% por concepto de subvención ordinaria.
“El año pasado (y) este año se demostró que las universidades tienen excesivos recursos que no gastan. Tienen este año un presupuesto de más de 2.800 millones de bolivianos de transferencias (...) que no están gastando. Hay más de 2 mil millones de bolivianos que están en caja y bancos”, apuntó Arce.
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