Gabriela llevó a su niña de poco más de un año a pasar clases con ella porque no podía faltar a la universidad ese día y no tenía con quién dejar a la pequeña.
La docente, tras admitir que nunca había sido madre, le dijo que le molestaba la presencia de la niña en el aula y le pidió que junto a su hija se retirara inmediatamente.
Ella y la niña se fueron, pero una semana después de este hecho, la universidad le pidió a la docente que también abandone el aula, pero para siempre.
Este hecho sucedió en una universidad privada de la ciudad y es una clara muestra de que la situación de las embarazadas o las jóvenes madres, en las casas de estudios superiores, definitivamente ha cambiado durante los últimos años.
Bolivia ha pasado de tener normas que sancionaban el hecho de tener un hijo a corta edad, y de prohibir continuar con sus estudios a las embarazadas, a intentar ayudar lo más posible a las mujeres que se encuentran en esta situación.
Pues además de garantizar el derecho a la educación que tienen todas las mujeres, más allá de su condición física, ahora también se les brinda otro tipo de apoyo para mejorar su rendimiento académico.
Estas ventajas están haciendo posible que cada vez menos mujeres tengan que renunciar a sus aspiraciones profesionales por un hijo, según coincidieron las autoridades de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), la Universidad Católica Boliviana (UCB) y la Universidad Privada del Valle (Univalle).
Un ejemplo de esta afirmación es la guardería que ha instalado la UMSS, que permite no solamente a las mamás universitarias, sino también a los jóvenes papás, dejar a sus niños por los 100 minutos que dura un periodo académico, para poder asistir sin mayores contratiempos a clases mientras sus hijos se encuentran en un lugar adecuado.
Esta guardería es administrada por la Federación Universitaria Local (FUL) y busca, entre otras cosas, “apoyar a las compañeras que tienen que estudiar, cuidar a su hijo y en algunos casos hasta trabajar”, dijo el máximo dirigente de la entidad estudiantil, Jarlin Coca, quien además informó que el costo de este servicio sólo es de 1 boliviano por el tiempo que dura una clase.
Esta guardería además funciona desde las 7:00 hasta las 22:00, pues está específicamente diseñada para satisfacer las necesidades de las madres o padres en la universidad.
Además de este servicio para los niños, las estudiantes también cuentan con el seguro de salud universitario en el que son atendidas sin mayores gastos.
A ello se suma la apertura de guarderías cerca de la universidad, que brindan atención por horas y a precios accesibles.
UCB y Univalle
En la Universidad Católica Boliviana (UCB) también se apoya a las universitarias que decidieron ser madres para que no trunquen su futuro abandonando sus estudios, pues según informó el rector de esta casa de estudios superiores, Alfonso Vía Reque, “tenemos la unidad de Bienestar Estudiantil que forma parte de la Pastoral Social, que se preocupa desde el ingreso del estudiante, la orientación, el seguimiento y resolución y ayuda en conflictos”.
En la Univalle, el vicerrector académico, Sandro Guerrero, informó que también brindan apoyo a las embarazadas desde el momento en el que ellas lo soliciten, a través de una entidad especial con la que cuentan, para atender esta situación, en la universidad privada.
“En la universidad contamos con el gabinete sicológico como un servicio que les da el apoyo que requieren”, dijo.
Guerrero explicó que Univalle cuentan con un gabinete médico que funciona de 8:00 a 16:00.
“Las estudiantes tienen todas las consideraciones y se les apoya con las evaluaciones dos o tres meses antes del parto o se acepta posponer los exámenes en estos casos. Como universidad, se brinda todo el respaldo para que no dejen sus estudios”, sostuvo.
Aumentan los beneficios para las futuras madres
El exgerente del Complejo Hospitalario Viedma y ginecólogo, Jaime Montaño, considera que durante los últimos años se ha incrementado la cantidad de embarazos en el país, por todos los beneficios sociales que se impulsan desde el Gobierno central.
Esta situación afecta a toda la población, incluyendo a los muchachos que están cursando sus carreras universitarias.
“Obviamente hay un aumento de los embarazos en las universitarias, provocado por factores que son impulsados desde el Estado esencialmente. El primero fue la creación del Seguro Universal Materno Infantil (SUMI) que permitió que los partos sean gratuitos, lo que directamente incide en que la gente ya no se cuide, porque sabe que tendrá un parto, atención neonatal y todo lo demás gratis”, dijo el experto.
El segundo factor identificado por el ginecólogo, respecto al incremento de los embarazos, es “que ahora te pagan 200 bolivianos cuando estas embarazada, por el bono Juana Azurduy. Aparte de eso, cuando trabajan y estudian, las embarazadas cuando van a dar a luz gozan de 90 días libres y sus maridos una semana libre, además de inamovilidad laboral durante un año”.
Según Montaño, otro beneficio social que estaría incidiendo en el incremento de los embarazos es el relacionado con el aumento del monto del bono de lactancia que asciende a 1.000 bolivianos.
“Así trabajen sólo medio tiempo, reciben ese monto y cuando nazca el bebé también le darán 1.000 bolivianos más. Todos estos beneficios sociales están provocando que cada vez nazcan más niños en el país y esto también afecta a las universitarias”, dijo.
Agregó que este factor afecta sobre los estudios, pues “en algunos casos las universitarias terminan permaneciendo más tiempo dentro de la universidad porque el embarazo las obliga a tomar menos materias para ocuparse de sus wawas. En los casos en los que hay padres que ayuden a la embarazada, continuar en la universidad es posible; pero en los que no hay ayuda, entonces es muy difícil continuar”.
Los beneficios sociales se extienden hasta el niño alcanza los 5 años de edad, con la atención en los servicios de salud públicos.
EL ANÁLISIS
Quien toma
la decisión
es la estudiante
Alfonso
Vía Reque,
Rector de
la UCB
Todos los problemas de los estudiantes se tratan desde la unidad de Bienestar Estudiantil, que depende de la Pastoral Social y que antes no había. Esta unidad se dedica a este tipo de casos (embarazos en estudiantes) y a otros, se preocupa desde el ingreso del estudiante, la acogida, la orientación, el seguimiento y resolución y ayuda en conflictos y tenemos montón de esto y estamos cada vez más persuadidos de que necesitamos incrementar este servicio, porque cada vez los jóvenes acuden más a nuestro consejo y orientación. Esta es una necesidad sentida de toda la juventud en cualquier parte.
En cuanto a embarazos, la estudiante que está embarazada es quien toma las decisiones para su futuro. Nosotros la orientamos para que ella pueda decidir libremente y en conciencia lo que ella debe hacer y finalmente si deciden que van a dar a luz a la criatura, también definen si van a tomar licencia o van a enfrentarse a la comunidad de sus condiscípulos y muchas aceptan enfrentar y todo eso tiene seguimiento.
Luego las ayudamos con la baja médica y a partir del próximo semestre vamos a tener seguro universitario para todos los estudiantes, que va a cubrir todos los accidentes y los embarazos y todo lo demás.
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