El conflicto entre la Universidad San Francisco Xavier y la Gobernación de Chuquisaca permanece inalterable después de que este lunes, el gobernador Esteban Urquizu reiterara su convocatoria al diálogo, no sin antes denunciar una aparente actitud negativa del rector Wálter Arízaga.
Urquizu dijo a medios locales que durante los dos intentos de acercamiento entre ambas instituciones, dirigentes de la institución académica intentaron desconocer su autoridad y trataron de llevar el conflicto hacia ámbitos políticos.
Esta mañana, grupos de estudiantes cercaron por varias horas el edificio de la Gobernación, impidiendo el ingreso y la salida de funcionarios, lo que provocó la protesta del Gobernador que acusó a los sectores universitarios de "buscar" un enfrentamiento.
No obstante, Urquizu dijo que reiteraba su llamado al diálogo, aunque sostuvo que la posición de la Gobernación respecto a los recursos del Proyecto Sucre Ciudad Universitaria debe ser tratado en función a la Ley 551 que estableció su funcionamiento.
Por su parte, el exvicepresidente y parlamentario del MNR, Julio Garrett, quien fue uno de los promotores de esa norma, que establece el 11 por ciento de las regalías petroleras departamentales para el sector universitario, dijo a medios locales que las observaciones planteadas por la Gobernación "carecen de todo fundamento".
Garrett dijo que la aplicación de la norma no debía ser puesta en duda, y que tampoco su vigencia estaba sujeta a "ningún tipo de negociación", como propuso en su momento la Gobernación.
Sin embargo, el exvicepresidente reconoció que era necesario hacer una evaluación sobre su funcionamiento y plantearse nuevos objetivos y responsabilidades, "aunque siempre en el propósito de destinar esos recursos a la educación superior".
Garret recordó que la Ley 551 "es una conquista del pueblo fruto de movilizaciones que convulsionaron la ciudad en 1983".
El comité de movilizaciones de San Francisco Xavier anunció que a partir del miércoles radicalizaría sus protestas para evitar el recorte aprobado por la Gobernación que significaría resignar recursos por el orden de 24 millones de bolivianos.
Por su parte, dirigentes de la Federación de Campesinos de Chuquisaca afines al gobernador Urquizu anunciaron también que iniciaran una serie de movilizaciones en respaldo a esa autoridad, y no descartaron el bloqueo de carreteras a nivel departamental.
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