jueves, 4 de julio de 2013

Tradición pudo más que el respeto a la ley en verbena de la FNI

Después de la verbena bailable como parte del aniversario de la Facultad Nacional de Ingeniería (FNI), de la Universidad Técnica de Oruro (UTO) y estando en vigencia la Ley 259, sobre la Venta y Expendio de Bebidas en lugares públicos, la alcaldesa Rossío Pimentel manifestó que la tradición de esta institución pudo más que el control de la Guardia Municipal para el cumplimiento de la norma.

Ayer por la mañana, efectivos de la Guardia Municipal en cumplimiento de la Ley 259, exigieron la documentación para el armado de tarima en la calle Ballivián y Pagador, para instalar la verbena bailable de la FNI por su aniversario, pues no contaban con el permiso del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO) para la realización del espectáculo público, además de obstruir una vía pública, según manifestó el jefe de la unidad de Defensa al Consumidor, sargento Juan Pedro Siles Vargas.

"Es de conocimiento público la vigencia de la ley que prohíbe el consumo de bebidas alcohólicas en vía pública, a pesar de ello la pasada semana se recibió la nota de la FNI, para el permiso de su actividad de aniversario, el cual se negó haciendo conocer la norma, pero ayer (miércoles) pudimos ver que la tradición sobre pasó la norma ahora se procederá con las sanciones correspondientes", manifestó la alcaldesa.

El Municipio, no permitirá mas firmas de convenios y menos autorizaciones por última vez. "Es tiempo de hacer cumplir la norma sin ninguna excepción", enfatizó Pimentel.

Por su lado el jefe de la Unidad de Recaudaciones del GAMO, Edson Zambrana, indicó que se procederá a emitir la sanción correspondiente, señalando que los efectivos de la Guardia Municipal estuvieron hasta altas horas de la noche controlando la actividad, siendo rebasados por los universitarios quienes sin entender ni comprender la ley, continuaron con su actividad.



MOLESTÍA

La gente que desde muy temprano transitaba por el lugar, mostró su indignación por la falta de control y el consumo excesivo de bebidas alcohólicas, pues la actividad dejó como resultado jóvenes ebrios que descansaban en vías públicas o continuaban bebiendo. "¿Cómo es posible que se permita estas cosas en pleno centro de la ciudad?, debería de sancionarse a estos jóvenes", manifestó la señora Ana Ortuño, que transitaba por el lugar.

Cerca de las 11:00 horas, se desarmó la tarima para la verbena, alrededor de botellas, latas de cerveza, además de charcos de aguas sucias y malolientes, que a pesar de la limpieza que algunos vecinos del sector hicieron, el mal hedor continuaba hasta cerca del mediodía.

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