El número de ingenieros que se dedica a la investigación en la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) crece. Actualmente 80 profesionales desarrollan proyectos para resolver distintos problemas y necesidades de la población.
Alimentos elaborados a base de productos naturales, construcción de equipos de última tecnología y procesos de desarrollo son parte de algunos de los proyectos que se realizan en el área de investigación.
El director del Instituto de Investigación de la Facultad de Ciencias y Tecnología de la UMSS, Eduardo Zambrana, explica que esta Casa Superior de Estudios busca ajustar las actividades de los proyectos y centros de investigación con los objetivos de desarrollo socioeconómico como la manufactura, agroindustria, salud, tecnología de información, saneamiento básico y tratamiento de aguas, entre otros.
La investigación en la UMSS comenzó a finales de los años 70 con proyectos de jóvenes científicos que iniciaron sus trabajos en áreas prioritarias de la región como agroindustria, alimentos, geotecnia y metalmecánica.
“En torno a esos núcleos se comenzó lo que hoy se conoce como centros de investigación”, menciona Zambrana.
Actualmente, la Facultad de Ciencias y Tecnología cuenta con 16 carreras y 10 centros de investigación, además de 9 departamentos donde se concentran los proyectos.
Cada departamento y centro de investigación tiene un plan estratégico, además de un Plan Operativo Anual, en el que se detallan los proyectos.
En el desarrollo de los proyectos participan investigadores junior, senior, estudiantes de pregrado y postgrado.
COOPERACIÓN
En la década de los 80, la UMSS comenzó a recibir cooperación internacional de diferentes instituciones provenientes de Holanda, Canadá y Bélgica para los trabajos de investigación.
A partir del año 2000 ingresa la cooperación sueca con un programa para toda la Universidad, pero con énfasis en la Facultad de Ciencias y Tecnología, con el objetivo de fortalecer la investigación en áreas como biotecnología, alimentos, agroindustrias y tecnologías de productos naturales.
La cooperación internacional colaboró también con la formación de recursos humanos en cursos de doctorado.
“En la última década, la cooperación de Suecia y Bélgica ayudó a formar profesionales críticos que aportan en la investigación, sobre todo en el área de biología y alimentos”, apunta Zambrana.
Existen convenios con universidades de Suecia y Bélgica, en modalidades de formación que se denominan sandwich. Una parte de la investigación se hace en Bolivia y otra en el exterior.
TRANSFERENCIA
TECNOLÓGICA
A todo esto se suma el concepto de vinculación de la universidad con la sociedad.
Para crear un nexo entre ambas instancias se ha creado el 2007 la Unidad de Transferencia de Tecnología para facilitar a los investigadores el acercamiento a instituciones y organizaciones interesadas en el área de investigación.
Por ello se realizan reuniones como una rueda de negocios, en la que ambas partes coordinan los proyectos de investigación.
La Unidad de Transferencia Tecnológica ha creado el proyecto Innova, una estrategia para la inclusión y participación de distintos actores en la investigación.
De esta manera se han conformado clusters (conglomerados) productivos en las áreas de alimentación y cueros. Los clusters son aprovechados para que todo el equipo reciba la misma capacitación y se puedan identificar los problemas y necesidades de estos sectores, para luego encontrar una solución.
RECURSOS IDH
Con la ayuda de los recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos, la investigación en la UMSS se vio favorecida, aunque se desconoce con exactitud la inversión que se realiza cada año.
“En los primeros años se ha usado una buena parte (del dinero) en infraestructura, pero ahora se hace inversión en investigación”, resalta Zambrana.˚
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