Se van las escuelas militares

Yo soy presidente de los padres de familia cuyos hijos estudian en la Escuela Militar de Topografía. El año 1987 se llevaron el Politécnico de El Alto a Cochabamba; el año pasado se llevaron la Escuela Naval Militar y este año se quieren llevar la Escuela Militar de Topografía, además nos avisan que también se llevarían la Escuela Militar de Música de Viacha y quizá el Colegio Militar del Ejército”.
Ése fue el discurso de sopetón que nos dio un joven abogado que quería explicar al periodista que quiera escuchar su singular cruzada. Hasta el cierre de edición de esta columna lograron ganar una batalla, más no la guerra.
El problema era el siguiente: La Paz estaba por perder una institución militar más, dentro de lo que parecen ser cambios dentro de las FFAA que pasan desapercibidos por el mundo civil pero que afectan a muchas familias.
Ya tenía algún dato suelto. Hay un grupo de scouts cuya sede hasta diciembre era la Escuela Naval Militar, colindante con la terminal de buses de La Paz. Este año esos scouts no saben dónde realizar sus actividades pues el inmenso espacio de la Naval se convirtió en un colegio particular. La Escuela Naval Militar ya está en Cochabamba.
Traslados sorpresivos
Según mi fuente, la Escuela Militar de Música que está en Viacha también se iría dentro de unos meses a Cochabamba e incluso el Colegio Militar del Ejército de Irpavi podría tener ese destino. Un militar de alto rango habría dicho: "Cuando traslademos el Colegio Militar no avisaremos a nadie para que no salgan con sus pancartas”. El general estaba molesto, pues este pequeño grupo de padres de familia de la Escuela Militar de Topografía incomodó en los actos de celebración de un nuevo aniversario del Estado Plurinacional.
Ese feriado, 22 de enero, unos desesperados padres de familia de esta institución pintaron algunas pancartas y se ubicaron en la plaza Murillo para reclamar por el sorpresivo cambio de sede de la institución donde estudian sus hijos.
"Había ya un rumor el anterior viernes pero recién ayer nos informaron oficialmente, hasta pareciera una trampa el hacer las cosas de forma rápida para que no reaccionemos; sin embargo, logramos organizarnos a la carrera para movilizamos. Este fin de semana se tienen que trasladar. El viernes se empacan y mandan los equipos; los estudiantes tendrían que trasladarse el domingo a Cochabamba”.
Es difícil creer que el traslado de esta unidad militar se avise sólo con tres días de anticipación, a menos que se esté en medio de una guerra y eso es lo que provocó precisamente la medida. Los padres de familia recurrieron a periodistas y a organizaciones cívicas y sindicales de La Paz y El Alto para denunciar lo que consideran una afrenta para el departamento.
"Nos sentimos frustrados y dolidos por la actitud del Gobierno porque esta unidad militar es parte del patrimonio paceño; el 90% de los estudiantes son de La Paz y sus provincias. Durante años se formaron ahí excelentes sargentos técnicos y ahora se están llevando todo a Tarata, en Cochabamba, a las instalaciones donde está la actual Escuela Militar de Sargentos. Ahí sólo tienen un polígono de tiro, es puro campo, no tiene ni muralla, sólo alambrado. No es pues apto para estudiar”.
BATALLA GANADA
Así se quejaba este padre, que con un día de antigüedad, y una desesperada directiva, logró movilizar a dirigentes de la Fejuve de El Alto, CSUTCB, Derechos Humanos y otras organizaciones alteñas y paceñas para lograr arrancar una promesa verbal del comandante del Ejército: el traslado se retrasa seis meses, hasta conseguir un terreno de 20 hectáreas para construir una nueva Escuela Militar de Topografía. Ése era el justificativo del traslado: que en el Gran Cuartel de Miraflores ya no había espacio para esa unidad.
Las verdaderas razones parecen ser otras, pero sería irresponsable siquiera citarlas sin tener más datos. En tanto, aquí acaba este relato que empezó con un inesperado saludo: "Yo soy presidente de los padres de familia cuyos hijos estudian en la Escuela Militar de Topografía…”.