Carlos tiene 33 años y se graduó como médico general hace cuatro. Durante ese tiempo rindió tres exámenes para ingresar a la especialidad médica de cirugía general, pero hasta la fecha no ha logrado buenos resultados.
Tras haber reprobado los tres exámenes, Carlos está convencido de que debe seguir intentando optar por la especialidad, pues salir al exterior en búsqueda de la residencia es un gasto que no puede costear.
Mientras continúa estudiando para su examen Carlos ayuda en su casa, en un negocio familiar de comida que tienen sus padres. Hasta la fecha no ha logrado ejercer su profesión porque tampoco existen ítems para médicos generales.
La realidad de Carlos no está lejos de la que viven muchos médicos generales en Cochabamba, que por falta de cupos en las residencias, no pueden continuar sus estudios.
El director de Postgrado de la Facultad de Medicina de la Universidad Mayor de San Simón, Jorge Villazón, explicó que cada año se postulan entre 1200 y 1500 médicos generales al examen para la residencia.
A pesar de que cada año se gradúan cerca de 500 médicos de la universidad pública y de las privadas, la alta demanda para una plaza por la especialidad se debe a que los profesionales que reprueban continúan intentando acceder a los cupos los próximos años.
Aunque se desconocen los porcentajes, una cantidad de médicos, que cuentan con recursos económicos, decide migrar cuando reprueba el examen para no perder más tiempo en su formación.
El ejecutivo del Sindicato de Ramas Médicas de Salud Pública (Sirmes), Carlos Nava, criticó la poca importancia que se da a la necesidad de contar con más especialistas en el país.
Manifestó que para cubrir la demanda de la población en la atención de ciertas patologías se debería otorgar cupos para al menos el 40 por ciento más de los estudiantes. Sumó que esto también evitará la migración de los profesionales.
Reclamó la falta de condiciones para habilitar un mayor número de especialidades, ya que con las 16 que existen actualmente no se puede abastecer la demanda de la población en la atención.
Según Nava, no se hacen las suficientes inversiones en el área de la salud y educación para poder facilitar la infraestructura y las condiciones para aumentar el numero de especialidades.
Mientras el ejecutivo de Sirmes cuestionó la falta de cupos, el presidente del Colegio Médico de Cochabamba, Aníbal Cruz, señaló que las especialidades no se pueden masificar “porque los hospitales no tienen la capacidad para acoger a muchos profesionales, pues al mismo tiempo existe una falta de ítems”.
Señaló que en Cochabamba hay un déficit de aproximadamente 1800 médicos y no existen ítems para darles trabajo a estas personas, motivo por el cual estos profesionales y algunos ya con especialidades deciden salir al exterior.
Indicó además que la formación actual es casi personalizada y si llegaría a masificarse no sería tan individual como lo es actualmente.
Señaló que el acceso a las especialidades no es un problema solo en Bolivia, sino también en otros países donde tampoco es fácil conseguir un cupo.
Villazón, por su parte, destacó que para abrir una especialidad hay que tener en cuenta dos elementos: el primero de ellos es considerar la necesidad epidemiológica en una determinada área y también tener en cuenta la capacidad de formación de los centros hospitalarios.
“Puede ser que se requiera una mayor cantidad de médicos especialistas. Pero velando por la calidad en la formación también se debe tomar en cuenta la capacidad educativa de los distintos centros”, mencionó.
Para el director de Postgrado de la Facultad de Medicina, el problema no solamente está en los cupos que se otorgan para la especialidad, sino también en la cantidad de estudiantes que se recibe para el curso propedéutico.
“Hay que hacer un análisis serio de la cantidad de médicos que estamos formando y también de la calidad, no creo que Cochabamba necesite más de 1000 médicos por año y mas aún si solo pueden ingresar 100 a las especialidades. Hay que regular esto”, resaltó.
ESPECIALIDADES
Las especialidades que están disponibles en Cochabamba son salud familiar comunitaria intercultural, cirugía general, ginecología y obstetricia, anestesiología, traumatología y ortopedia, pediatría, medicina interna, imagenología, medicina familiar, cirugía general, anestesiología, urología, medicina crítica y terapia intensiva, neonatología, terapia intensiva pediátrica, gastroenterología, psiquiatría y oftalmología.
CENTROS
Los centros que están habilitados para la formación de los médicos son: el Hospital Obrero Nº2 de la Caja Nacional de Salud, el Hospital Viedma, el Hospital Materno Infantil Germán Urquidi, el Instituto Gastroentereológico Boliviano Japonés, el Instituto Psiquiátrico San Juan de Dios, entre los públicos y el Hospital Albina Patiño, el Centro Quirúrgico Belga, la Fundación Oftalmológica Boliviana, el Seguro Social Universitario y la clínica Los Olivos entre los privados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario