La comunidad iberoamericana impulsará su primer programa regional de becas de movilidad para profesores y estudiantes universitarios, que aspira a ser un embrión de un plan más amplio similar al Erasmus europeo, anunció ayer la Secretaria General Iberoamericana (SEGIB), Rebeca Grynspan.
La titular de la SEGIB hizo el anuncio durante la apertura del III Encuentro Internacional de Rectores Universia, que se celebra hasta hoy en Río de Janeiro, con la presencia de 1.103 directores de universidades de todo el mundo.
La creación del nuevo programa, que llevará el nombre del pedagogo brasileño Paulo Freire (1921-1997), ya ha sido decidida y será oficialmente anunciada el próximo 28 de agosto durante la conferencia de ministros de Educación iberoamericanos que se celebrará en Ciudad de México.
Las becas dependerán de la financiación pública y privada e inicialmente beneficiarán a 5.000 profesores y estudiantes de todos los países iberoamericanos del área de la educación, aunque el objetivo de la SEGIB es ampliarlas a otros sectores.
“Hemos privilegiado las becas en el sector educación y me parece que es una muy buena iniciativa porque en general no recibe la atención para mejorar la educación en la región, pero de lo que se trata es que (el programa) pueda ser abierto ya que existe una demanda de los estudiantes para su movilidad”, dijo Grynspan.
También mencionó las ciencias sociales, las humanidades y las disciplinas científicas como sectores en los que existe un “déficit” de colaboración entre los países iberoamericanos. Grynspan llamó a “elevar el nivel de ambición” y crear un programa de becas, al ejemplo del Erasmus, que según ella “ha contribuido a crear una identidad comunitaria” en Europa.
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