Estudiantes de base de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) la madrugada de ayer ingresaron violentamente al campus principal abriendo las puertas con dinamitas y enfrentándose con el grupo de estudiantes de la Federación Universitaria Local (FUL) que se encontraba en vigilia.
El estallido de petardos y dinamitas despertó a la población cochabambina cerca de las cuatro de la madrugada de ayer, momento en que un grupo de estudiantes de base con palos, petardos y dinamitas tomó los ambientes del campus principal de la UMSS resguardados por estudiantes de la FUL.
La primera medida del grupo de choque fue abrir las puertas del ingreso principal a la Universidad con dinamitas. Posteriormente, el grupo de más de 50 estudiantes encapuchados se dirigió hasta las oficinas de la FUL para prenderle fuego y tomar la radio universitaria.
A su encuentro salió el grupo de estudiantes de la FUL, quienes armados de palos y petardos se enfrentaron con el grupo de choque por casi una hora desatando una batalla campal en la universidad que alarmó a los vecinos de la plazuela Sucre, ellos fueron testigos presenciales de lo ocurrido.
"La universidad parecía un campo minado, fuertes han sido los estallidos, parecían de dinamita, los perros ladraban descontrolados, todos los vecinos prendieron las luces, muchos salieron a las calles", relata Gustavo Vargas vecino del lugar.
Mientras los estudiantes se enfrentaban, las llamas crecían en las oficinas de la FUL que quedaron totalmente calcinadas junto a muebles, documentación y otros objetos de valor.
"Todo se ha quemado, se han robado la cocina que teníamos, han destrozado las computadoras, el inmobiliario, documentación importante", aseguró Daniel López, miembro de la FUL.
La ola de violencia aumentó cuando los encapuchados sacaron a patadas, puñetes y empujones, a los estudiantes que estaban en la FUL, hasta exteriores. Tras más de una hora de enfrentamientos, la Policía recién llegó al lugar para gasificar la zona y dispersar a los dos grupos.
"Son 25 estudiantes en cuyas mochilas se han encontrado petardos y bombas caseras que han sido trasladados hasta la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen", informó el comandante departamental de la Policía, coronel, Luis Aguilar.
Mientras empezaba a amanecer, el clima de tensión e incertidumbre aumentó con la llegada de más estudiantes simpatizantes de la FUL, quienes en la plazuela Sucre y exteriores de la universidad se reuníeron para tomar el control de sus predios. Los encapuchados que protagonizaron la toma ya habían escapado del lugar.
FUL RETOMA EL CONTROL
Armados de palos, piedras, petardos, bombas molotov, con los rostros cubiertos y enardecidos por lo ocurrido, cerca de las nueve de la mañana, cientos de estudiantes y grupos afines a la FUL ingresaron violentamente hasta el campus principal para retomar el control y perseguir a los agresores, parte del grupo de choque. Durante toda la mañana, se vivió un clima de tensión e incertidumbre.
"Estamos recuperando nuestra universidad de los traidores que han sido pagados por el Rector y su camarilla de docentes mediocres que no quieren dar examen", manifestó el dirigente de la FUL, Alejandro Mostajo.
Por su parte, el también dirigente de la FUL, Jarlín Coca, denunció que el grupo de choque que incendió sus ambientes y tomó la Universidad en horas de la madrugada fueron contratados por las autoridades universitarias y estaba conformado por pandilleros y grupos afines del Movimiento Al Socialismo MAS.
"No creo que estudiantes de base que quieren pasar clases vengan en la madrugada a incendiar nuestra Universidad y agredir a los compañeros", aseguró.
Los estudiantes se mantuvieron en vigilia durante toda la mañana, en varios momentos nuevamente hubieron amagues de enfrentamiento. La Policía nuevamente tuvo que utilizar agentes químicos para evitar mayores incidentes. Un estudiante de Agronomía y dirigente universitario, Néstor Copaga, resultó gravemente herido por un golpe en la cabeza y tuvo que ser llevado hasta terapia intensiva el Seguro Social Universitario SSU.
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