Su caso es extraordinario, pues tiene un coeficiente mental de 143 puntos que le llevó a superar primaria, secundaria y la Universidad sin complicaciones.
Pese a tener este nivel intelectual, que en el ámbito de la ciencia es calificado como “muy superior”, Leo, como así lo conocen sus compañeros, siempre fue una persona tranquila.
Si los trabajos debían hacerse en grupo él siempre participaba y entre todos se cooperaban, dijo uno de sus compañeros a la red televisiva ATB.
De acuerdo con el portal la Guioteca ¿Qué quieres saber?, el coeficiente intelectual tiene una media de 100 puntos. Si la persona saca un puntaje mayor a este número “es más inteligente”, pero si la calificación del coeficiente supera los 130 puntos, corresponde a la categoría “Muy superior”, que es la máxima.
Leo contó que aprendió a leer a los dos años, cuando empezó armando las sílabas, algo que dejó sorprendido a sus padres. A los cinco años ya estaba en quinto y luego continuó su paso por el nivel escolar hasta salir bachiller a los 14 años.
Luego, siguió su carrera profesional en UNIVALLE y a los 18 años se graduó como ingeniero en Sistemas Informáticos el pasado viernes y en poco tiempo lo hará en Ingeniería Civil en la Universidad San Francisco Xavier.
Esa su condición excepcional le llevó a realizar una pasantía universitaria en la Compañía Eléctrica Sucre Sociedad Anónima (CESSA), donde su capacidad ya es reconocida.
A su paso por la escuela, el colegio y la universidad la diferencia de edad que tenía con sus compañeros no fue un obstáculo para que pudiera integrarse al grupo como lo reconoció y lo ratificó uno de sus compañeros. “Leonardo se destaca por su compañerismo”, dijo.
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