Las plataformas virtuales como Zoom, Moodle, Classroom y otras que ofrece Google, son las opciones de varios docentes para mantener las clases en esta coyuntura. Los profesores que implementan estas tecnologías consideran que habrá un antes y un después en el pregrado nacional.
El presidente de la Asociación Nacional de Universidades Privadas, René Polo, explicó que varias de estas instituciones tuvieron una experiencia similar durante el conflicto poselectoral en octubre pasado. Fue un tiempo de “prueba piloto” que nuevamente en la actualidad lo vuelven a encarar.
Los Tiempos conversó con autoridades de varias universidades para conocer sus experiencias, los retos de dictar clases en temporada de confinamiento total, su adaptación al mundo digital y la exploración de docentes y estudiantes.
Las universidades
El 12 de marzo, apenas se confirmó los primeros tres casos de Covid-19 en el país, la presidenta Jeanine Áñez determinó la suspensión de clases a nivel nacional, una medida para frenar el avance del virus. Horas después, varias universidades publicaron en sus cuentas oficiales de redes sociales sobre la pausa de clases presenciales. Ese día fue determinante para repensar en la educación virtual.
En principio, todos decidieron dar continuidad a sus clases a través de plataformas online. No obstante, el 27 de marzo la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) dispuso suspender esta modalidad, a través de un comunicado, aseguraron que varios de sus estudiantes no contaban con acceso a internet y tampoco lograron inscribirse a sus respectivas materias.
La vicerrectora de la UMSS, María Esther Pozo, explicó que esta casa superior de estudios cuenta con aproximadamente 80 mil estudiantes y cerca del 50 por ciento son de provincias con limitaciones a internet.
“Nos informaron que varios de ellos recibieron sanciones cuando iban a comprar sus tarjetas para sus datos. También gastaban más de lo usual. Por ejemplo, nos dijeron que una tarjeta que costaba a Bs 10, la adquirían en 15 o más. No podíamos ser indiferentes ante esta situación”, sostuvo.
Por otra parte, un docente de la UMSS, que quiso mantener su identidad en reserva, explicó a Los Tiempos que uno de los factores importantes para esta suspensión fue también el plantel docente, cuya población es de 2 mil, debido a que existe una gran cantidad que no está preparada para llevar libremente sus clases virtuales, es decir, no saben utilizar las plataformas.
La Vicerrectora admitió que para la UMSS no es fácil la transición inmediata de las clases presenciales a las virtuales. Luego de la cuarentena gestionarán convenios con Entel, Tigo y también con las mismas alcaldías de distintos municipios para facilitar el acceso y así evitar la misma situación a futuro. También tienen contempladas capacitaciones para las plataformas online.
“La suspensión de las clases fue a solicitud de los estudiantes. No podemos tener dos calendarios académicos. Vamos a repensar luego del confinamiento en otras estrategias. Estamos pensando en nuestros estudiantes”, concluyó la autoridad.
Universidades privadas
Todas las universidades privadas consultadas por este medio de comunicación se encuentran pasando clases online desde mediados de marzo utilizando varias plataformas.
UPB
El vicerrector académico de la Universidad Privada Bolivia (UPB), Alberto Sanjinés, explicó que previo al inicio de las clases online se capacitó a los docentes para poder usar las plataformas digitales y de esa manera dar continuidad al avance de las distintas materias.
“Hemos incorporado todo el sistema de video conferencias con el sistema de gestión de la universidad. Esto nos permite administrar los horarios y las aulas virtuales”, comentó.
Las plataformas que actualmente más de 1800 de sus estudiantes utilizan son Zoom, Mooble, Survey UPB y otras herramientas. Éstas varían de acuerdo a las necesidades de las carreras.
Univalle
El vicerrector académico de la Universidad del Valle (Univalle), Diego Villegas, señaló que desde el 2010 cuentan con una plataforma que fue desarrollada por Microsoft la cual posibilitó experimentar la modalidad virtual como apoyo a la clases presenciales.
Dijo que esta herramienta permitió mantener la relación entre docente y los 14 mil estudiante que tiene en el país, de los cuales cerca de 8 mil están en Cochabamba.
“No solo lo estamos usando ahora por la coyuntura, ya nos era familiar. Ahora sí lo estamos utilizando al 100 por ciento para el desarrollo del proceso de enseñanza y aprendizaje”, explicó.
Católica
La directora académica de la Universidad Católica Boliviana San Pablo, Yanina Galaburda, mencionó que las primeras dos semanas fueron de experiencia y aprendizaje entre estudiante y docente, quienes se familiarizaron con la nueva modalidad de trabajo. Aseguró que la coordinación, capacitación e intercambios de experiencias dio buenos resultados.
Actualmente, los docentes usan Cisco Webex (para la cual cuentan con licencia), Zoom y otras herramientas que ofrece Google para el desarrollo de sus clases. Además, la universidad cuenta con el sistema de información académica, una plataforma en la que los estudiantes intercambian tareas, evaluaciones y otros datos.
“Hemos recomendado a los docentes que no podemos avasallar a nuestros estudiantes con tareas. Estamos midiendo el avance y cuidando la calidad académica porque necesitamos asegurarnos de que ellos puedan trabajar en esta nueva modalidad”, explicó.
Esta universidad cuenta con más de 3500 estudiantes y existe una pequeña población que no tiene acceso a internet. Galaburda dijo que esto fue tratado en coordinación con los directores de carrera y la federación de estudiantes.
Galaburda afirmó de que ninguna universidad estaba preparada para esta situación, es decir, dar clases online, pero la Católica “está realizando sus mejores esfuerzos para poder impartir una enseñanza adecuada”, agregó.
Unifranz
La enseñanza de la Universidad Franz Tamayo (Unifranz) en época de cuarentena es una conjugación de su plataforma propia de la institución y las herramientas: Moodle, Zoom, Meet, Hangout, Schoology y Classroom.
“Siempre hemos tratado de innovar, así que nuestros estudiantes están acostumbrados a clases espejos con universidades de otros países, pero sin duda lo sucedido en octubre nos preparó para esta nueva coyuntura”, mencionó el vicerrector de Unifranz, Rolando López.
Asimismo, dijo que la universidad intenta anticiparse a las tendencias y busca mejorar la educación. Recordó que principios de marzo, en alianza con Virtual Educa, se realizó el Primer Foro Internacional sobre los “Desafíos de la Educación Superior en el Siglo XXI”, y la conclusión fue la necesidad contar con una normativa para la educación online.
USIP
La directora financiera de la Universidad Simón I. Patiño (USIP), Laura Sologuren, dijo que su panel docente también recibió capacitación sobre el manejo de herramientas virtuales académicas para brindar clases a los aproximadamente 2600 estudiantes.
Sostuvo que una vez finalizada la cuarentena se retomarán las evaluaciones y brindarán apoyo a los estudiantes de manera personalizada de acuerdo al requerimiento.
“No cabe duda de que esta situación se salió de nuestras manos, pero se está trabajando para acomodarse a la necesidad de nuestros estudiantes”, acotó.
Ucatec
El rector de la Universidad Privada de Ciencias Administrativas y Tecnológicas (Ucatec), René Polo, dijo que desde hace más de 10 años cuentan con tres modalidades virtuales de trabajo y de comunicación, una de ellas es la plataforma virtual de la misma institución; la segunda, son las redes sociales; y la tercera, las plataformas de virtuales de videoconferencia.
“Nuestros estudiantes desde primer semestre ya están capacitados para poder trabajar de esta manera. No es novedad poder ellos”, aseguró.
Polo señaló que previo a la cuarentena se capacitó a los docentes en el manejo de plataformas virtuales y en la generación de contenido para educación virtual.
Udabol
El vicerrector de la Universidad de Aquino (Udabol), Carlos Canedo, indicó que desde hace dos años se manejan una plataforma virtual que posibilitó a experimentar las clases semipresenciales. Afirmó que están familiarizados con esta modalidad de trabajo.
Sin embargo, uno de los mayores desafíos que afrontan es que de los 3600 estudiantes pertenecientes a esta universidad, existe una población que no cuenta con acceso a internet.
El mundo virtual y la educación
El especialista en tecnologías de la información, Marcelo Durán, dijo que las universidades locales tuvieron una experiencia desde hace varios años con el software Moodle que posibilitó a un escenario asincrónico; sin embargo, con la coyuntura actual cambió totalmente este panorama para convertirse a una práctica sincrónica, es decir, en tiempo real.
“Muchos docentes aman dar clases en aula porque se llevan bien con sus estudiantes y lo hacen didáctico. En las plataforma virtual es todo lo opuesto, es un ambiente frío. Si logramos aprovechar esta situación, tranquilamente podemos a futuro proponer campus virtuales como las grandes universidades en el mundo”, sostuvo.
La pedagoga Elizabeth Jiménez, señaló que hay varios docentes tanto en universidades públicas como privadas están atravesando por una etapa complicada por esta transición las cuales pueden ser superadas con capacitaciones.
No obstante, consideró que los principales problemas de esta situación son las consecuencias de aislamiento total que afecta al estado emocional de ambas partes y también las carencias socioeconómicas de los estudiantes.
“No todos tenemos todo para estar en casa y de ahí responder a las demandas académicas. No dudo de que debemos pasar al mundo digital, pero hay buscar una solución, pero sin desconocer la realidad de los estudiantes”, apuntó.
Jiménez sugirió que debe pensar alternativas institucionales que respondan a estas necesidades. “Dudo del exitismo que estén teniendo las demás universidades cuando los estudiantes no tienen estas condiciones y que por miedo no lo están dando a conocer”, agregó.
Por otra parte, Durán aseguró que el desafío que deja esta experiencia es la monetización. Recordó que en 2014 ya se había presentado una Ley de Teletrabajo que recién será analizada. “Entender la monetización con una normativa cambiaría totalmente el panorama laboral. El trabajo en casa sería remunerado”, acotó.
El presidente de la Asociación Nacional de Universidades Privadas, René Polo, comentó que Brasil el 45% de educación universitarias ofrecen un campus virtual. “Tenemos que pensar en futuro. Sin duda, esta experimentación nos ayudará a buscar soluciones. Marca un antes y un después en la educación”.
Acceso a internet en Bolivia
Según el informe publicado por Speedtest en 2019, hay más de 454 millones de usuarios de internet en América Latina y el Caribe. En el ranking de 20 países de este continente con mejor velocidad, Uruguay lidera la lista. Bolivia se posiciona en el número 16.
La Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT), en un informe de 2019, reveló que en el país se registró más de 10 millones de conexiones a internet, un crecimiento exponencial entre 2008 y 2018. Sin embargo, más del 90% de estas conexiones son a través de teléfonos móviles.
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